Las Mandarinas y Las Pavas están en zonas peligrosas, y al igual que la zona de Cinchona expuesta a deslizamientos, de acuerdo con un estudio de la Escuela Centroamericana de Geología de la Universidad de Costa Rica.
El estudio, contratado por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) reveló que la zona del cañón del río de Bajo Cacao en Atenas, Alajuela, es muy similar a la región de Cinchona y por lo tanto está expuesta a deslizamientos, razón por la cual unas 50 familias están viviendo en alto riesgo.
La investigación realizada por esta escuela, a solicitud de la CNE, utiliza una metodología denominada MVM, que permite desarrollar una aproximación del grado de susceptibilidad al deslizamiento de una región determinada.
Luego de la tragedia del 11 de octubre del 2007, donde un muro de gaviones colapsó y sepultó seis casas provocando la muerte de 14 personas, la CNE ha mantenido una vigilancia permanente y constante acercamiento con las familias que aún permanecen en la zona. Precisamente, en junio de este año en una reunión entre la comunidad y la presidenta de la CNE, Ing. Vanessa Rosales acordaron la contratación de la Universidad de Costa Rica, como ente externo, para que elaborara un mapa de riesgo que permitiera detallar cuáles viviendas se ubican en terrenos con una condición de peligrosidad.
Al igual que en aquella oportunidad, hoy los vecinos se comprometieron a acatar los resultados del informe emitido por la Escuela Centroamericana de Geología, representada por Rolando Mora, su director y no regresar a la zona de riesgo.
La presidenta de la CNE, Ing. Vanessa Rosales explicó que a pesar de que el informe no satisface los intereses de todos, la institución está en la obligación de no reconstruir en riesgo y, sobre todo, tiene que velar por la vida y la seguridad de las familias.
Los vecinos de las comunidades afectadas agradecieron a la CNE y a la escuela Centroamericana de Geología por la preocupación y la respuesta a sus inquietudes, pero solicitaron que no los desamparen, para que las otras instituciones cumplan con sus compromisos.
El estudio de la UCR
Los expertos de la Universidad indican que esta zona se caracteriza por presentar una predominancia de pendientes de moderada a fuertes, las cuales se asocian con un terreno muy irregular y muy similar a la región de Cinchona. Por lo tanto, recomendaron restringir el uso del sector denominado como Conservación, evitando a toda costa el desarrollo de infraestructura habitacional.
Además, Rolando Mora, director de la Escuela Centroamericana de Geología, explicó durante la presentación del estudio que unas 25 familias de Las Mandarias se ubican en área de muy alto riesgo y 24 de Las Pavas no pueden regresar a esa zona.
Explican que los factores de disparo para los deslizamientos están relacionados con las fuertes pendientes, la lluvia y, sobre todo, a la sismicidad como factor importante en la región.
Estudio geológico
Rolando Mora, director de la Escuela Centroamericana de Geología, aseguró que se encargará de realizar un estudio geológico de la finca que se compró para la reubicación de las familias afectadas.
Vanessa Rosales acordó con la comunidad crear una comisión interinstitucional (con Acueductos y Alcantarillados, Ministerio de Vivienda, Instituto Mixto de Ayuda Social, Ministerio de Salud y otros) para atender las necesidades de vivienda de las familias afectadas, que iniciará su trabajo a partir de enero.
Además, se encargará de trasladar los resultados de este informe a las diferentes instancias para lo que corresponda, tales como el municipio, los sectores de vivienda, social y salud.